En 1968, Alberto Zuckermann (Ciudad de México, 1946) tenía 22 años y estaba loco por el jazz. Una noche, después de las funciones del Festival de Newport en México, entre los camerinos del Palacio de Bellas Artes se topó con una bella mujer afroamericana: se trataba de Frances Taylor Davis, exesposa de Miles Davis, quien había salido en la portada de su disco “Somedaty My Price Will Come”.
Junto con un amigo, Zuckermann se apresuró a invitar a la dama al club donde los músicos seguirían la velada. La noche, sin embargo, no sería del todo placentera: Miles estaba también México y “tenía muy mala fama, era de muy mal carácter y decían que siempre andaba armado, por lo menos con una navaja”. Si bien Frances ya no era su esposa, el trompetista seguía sintiendo celos por ella.
Zuckermann rememora aquella época como dorada, en la que los más grandes jazzistas llegaban al país y existía un verdadero ambiente para disfrutar del género. La anécdota de Davis y otras más aparecen en “El jazz en la Ciudad de México, 1960-1969” (Fondo de Cultura Económica, 2022), libro en el que el pianista recopila sus recuerdos y ofrece un sucinto recuento cronológico del género, durante una década, así como de sus protagonistas.
“Apenas en 1962, Bellas Artes dejó que entrara el jazz a su escenario principal y llegaron por primera vez muchos músicos importantes como Ella Fitzgerald, Benny Goodman; era descubrir todo ese panorama tan rico que ofrecía el jazz tanto a nivel internacional como con los músicos mexicanos que empezaban a hacer sus grupos y sus discos y presentaciones”, dice.
Por la ciudad existían clubes donde se tocaba jazz, como el Riguz, frente al Parque Hundido; y a pesar de los prejuicios se desarrolló con músicos como Tino Contreras o Chilo Morán. El boom, sin embargo, duró poco: ahora, dice Zuckermann, “Bellas Artes tiene más de cuatro años que no ofrece ninguna presentación de jazz en sus dos salas, ni con mexicanos ni con extranjeros, parece que estamos, otra vez, vetados los jazzistas de Bellas Artes”.
FRASE
“Hasta los mariachis y los tríos románticos cobran mucho más que nosotros; cuando nos dan algo tardan tres meses en pagarnos: es una proeza vivir del jazz en México”.
ALBERTO ZUCKERMAN
PIANISTA
ELEMENTOS
- Zuckerman ubica el álbum “Jazz en México”, de 1954, como el antecedente del movimiento
- Un importante foro para el jazz fue el Teatro de la Paz, que programaba en género cotidianamente
- Veranda, Riguz, Salón Rubí y los bares Bamerette, Montenegro y Via Veneto programaba jazz
LSN
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