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¿Cómo leer a Borges? Claves para adentrarse al universo del escritor argentino

Para acercarnos a sus libros sin morir en el intento, consultamos a un especialista para que no dé una pequeña guía y demos los primeros pasos dentro del universo borgiano

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A 36 años de su muerte, el argentino sigue estando vigenteCréditos: Wikimedia Commons

Jorge Luis Borges es uno de los grandes exponentes de la literatura latinoamericana y mundial. Sus cuentos y poemas han influenciado a generaciones de escritores, además de que hay huellas marcadas en varios géneros posteriores a su obra.

A 36 años de su muerte, el argentino sigue estando vigente. Sus grandes obras las vuelven a reeditar, sus cuentos están en sus planes de estudio de las escuelas y sus poemas todavía se estudian en los artículos académicos.

Sin embargo, tomar uno de sus libros no siempre es sencillo. Por ello, en El Heraldo de México consultamos a Iván Ríos Gascón, periodista y escritor mexicano, para que nos cuente un poco sobre este gigante escritor sudamericano, sus impresiones y si hay que saber algo antes de aventurarse al universo borgiano.

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Consultamos a Iván Ríos Gascón, periodista y escritor mexicano, para que nos cuente un poco sobre este gigante escritor sudamericano (Foto: Wikimedia Commons)

¿Cómo es el estilo de escritura de Borges?

Si miras la escritura de Borges, lo asombroso es la búsqueda de lenguaje. Es realmente impresionante como en su prosa hay un naipe de palabras que le abren al lector otra perspectiva de nuestra propia lengua. En palabras como estolidez, nos obliga a buscar su significado en los diccionarios. Yo creo que es una de las mayores riquezas de esta prosa, que además es poética, dosificada.

No olvidemos que Borges era poeta y siempre buscó esa musicalidad, esa perfección de las frases, a veces con una economía maravillosa del lenguaje porque te transmitía el mensaje de manera contundente. 

¿Por qué te decía estas palabras particulares? Recordemos que cada vocablo en nuestro idioma tiene un sentido preciso. Si bien que hay sinónimos para designar una idea, Borges siempre se centraba en el sentido exacto, preciso, que quería darle el texto; es una maravilla si tomamos en cuenta la riqueza de nuestro idioma, en comparación con el inglés, por ejemplo, que es mucho más económico en muchos aspectos. En el nuestro tenemos una variedad infinita de vocablos que nos darían el sentido preciso de lo que queremos expresar.

¿Por qué a Borges no le gustaba el barroquismo en la escritura?

Borges tiene una información sui generis. Es bilingüe desde el seno su familia; ellos hablaban inglés y español. También viajó mucho. Durante un tiempo estuvo mucho tiempo en Ginebra, donde pasó gran parte de su adolescencia. Fue trashumante. 

Fue un poco como Pessoa, este poeta portugués; había ciertas similitudes con esas formaciones. Si bien Pessoa nace en 1888 y Borges en 1899, en realidad hay 11 años de diferencia. ¿Pero por qué te comento todo esto? Porque precisamente el encuentro de aproximación con distintos idiomas son los que le dan a Borges una noción completamente diferente del lenguaje y lo lleva a tratar de llevar a cabo una depuración de la de las expresiones, una depuración verbal para alcanzar la perfección.

Su desdén por el barroquismo lo veo como un rasgo de su propia personalidad. Era un hombre muy conservador. Recordemos que en el barroco confluyen muchos estilos. Puede llegar a ser un híbrido de estilos literarios, de propuestas estéticas y era algo que Borges no era afín y sospechaba de esos híbridos.

Ahora bien, eso no tuvo nada que ver con que Borges creara su propio mundo, su propio universo de ficción que era verdaderamente algo maravilloso, que además sentó las bases de muchísimas corrientes. Borges indudablemente es una figura fundamental en el posmodernismo. Hay que leer a Umberto Eco, en donde se nota la influencia de Borges en sus textos. El nombre de la rosa, por ejemplo; todos los elementos que recupera del universo borgiano: el laberinto, estos templos intrincados, complejos y esas arquitecturas de la imaginación asombrosas.

Pero también se dice que hay quienes apuntan que Borges es precursor, de un modo u otro del realismo mágico. Entonces, su propio estilo, de todos modos, sentó las bases para otros géneros, sin que olvidemos que él desconfió de estos híbridos como el barroco.

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Jorge Luis Borges es uno de los grandes exponentes de la literatura latinoamericana y mundial (Foto: Wikimedia Commons)

Para un lector novato de Borges, ¿qué se necesita saber antes de meterse a ese mundo?

Yo creo que nada. Yo creo que no tenemos que hacer nada, simplemente entregarnos al placer del texto. La lucidez de Borges era juguetona; así como te planteaba situaciones aparentemente muy complejas, él mismo te iba dando las claves de lo te estaba contando.

En "El Inmortal", por ejemplo, te va explicando parte por parte de dónde vienen todas estas ideas, de donde vienen todas estas propuestas, estos mundos extraños. Y al final tú mismo como lector vas deduciendo el juego narrativo que te está proponiendo. Resulta que el personaje pudo ser Homero no era Homero. Este troglodita que se encuentra el narrador en ese mundo, en la ciudad de los inmortales. En un principio cree que ese Homero lo bautiza como el perro de Ulises y después te explica que la voz de narrativa era del propio Homero.

En realidad ves que hay que leer a Borges siempre pensando que estás entrando a un juego narrativo en donde te vas a divertir y lo único que necesitas es un poco de atención para ir encontrando todos estos múltiples detalles, estos guiños, que el propio autor te va poniendo.

Si pensamos en el texto de "El Aleph", nos cuenta que solamente es el juego de la mirada del universo. Podemos interpretarlo de muchas maneras. ¿Cuál es la mirada atenta del universo? Precisamente es nuestra propia mente, nuestra cabeza, nuestro intelecto. Es decir, todo lo que leemos conforma un universo. El Aleph como metáfora de todo ese aprendizaje que los personajes han tenido a lo largo de su vida y que en apariencia se empieza a olvidar, de repente resurge en un momento determinado cuando por alguna razón recuerdas algo o identificas algo que te ha pasado desapercibido.

Creo que creo que hay que entrar a Borges como cualquier otro lector. No todo en él es complejo, intrincado. Pensemos en Historia universal de la infamia, que son relatos de lo truculento, de la maldad, de los canallas más despiadados, de los cuchilleros, de los arrabales argentinos. Ese es un gran libro que no tiene más sentido, en el que no se involucra tanto el universo fantástico, sino que es un texto más aterrizado. Entonces de Borges hay que leerlo nada más. Simplemente hay que leerlo.

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