A Julio Galán (Múzquiz, 1959-Zacatecas, 2006) nunca le interesó ser identificado como un artista de corte nacional, ni que se le comparara constantemente con Frida Kahlo, afirma la curadora Magali Arriola: “Su obra se conoce, pero se ha quedado muy encapsulada dentro de una apreciación muy local, dentro de los parámetros que se conocían, en su momento, como neomexicanismo”.
“Siento que hay una parte interesante de la cual no se ha hecho suficiente hincapié: que que el propio Galán decía que no era la parte que le interesaba, él decía que realmente era una circunstancia el que fuera mexicano y que la manera en que se relacionaba con el contexto era meramente circunstancial, nunca se identificó con el movimiento neomexicanista”, agrega la directora del Museo Tamayo.
Arriola lleva varios meses organizando la exposición “Un conejo partido a la mitad”, que a partir del 4 de junio revisa la práctica pictórica de Galán, así como su relación con la fotografía, el cine y el performance. “Es un proyecto organizado por el Tamayo que después va a itinerar al Marco de Monterrey, y es una mirada retrospectiva sobre su obra, que de alguna manera va rastrear las relaciones de su pintura con otras disciplinas”.
Para conformarla, se ha echado mano principalmente de colecciones privadas, tanto de México como del extranjero, la muestra ocupará tres salas del recinto de Chapultepec e incluirá pintura, fotografía, video, documentos y hemerografía. “Hay todo un ensalzamiento de la relación que tiene su obra con Frida Kahlo, sobre todo por la cuestión del autorretrato, pero siempre renegó de eso y dijo que no era algo que hiciera conscientemente ni que le interesará siquiera”.
La idea, agrega, “es otra vez sacarlo de la cápsula en donde está como atrapado y enfocarlo más hacía otro tipo de cuestiones, donde no solamente tiene que ver la cuestión de género y salir del binomio masculino, femenino, sino la importancia de las infancias y darle otro tipo de contextualización dentro de cierto tipo de pintura narrativa de los 80 que estaba sucediendo en México y en el extranjero, partiendo del hecho de que vivió del 84 al 90 en Nueva York”.
ELEMENTOS
- La última revisión de la obra de Galán se hizo en 2007, tras su muerte.
- La mayor parte de su vida radicó en Monterrey, donde truncó sus primeros estudios.
- Durante su vida realizó varias estancias en Nueva York y Europa.
- 47 años, edad a la que murió Julio Galán.
- 3 salas del Tamayo ocuparán la exposición.
Fotos: Cortesía
Julio Galán
Esperando la llegada, 1983
Óleo sobre tela y papel espejo
Julio Galán
Sin título, 1994
Pastel y collage sobre papel