La mirada panorámica desde el Cerro de la Estrella se entrelaza con una paloma posada en la cabeza de un transeúnte, la cultura del barrio se traslada en el transporte público, y la violencia se vuelve un retrato familiar reinterpretado por la cámara fotográfica, así las imágenes realizadas por alumnos del taller de fotografía de calle, impartido por Irving Cabrera, se han convertido en postales que retratan la historia contemporánea en momentos donde la emergencia sanitaria por COVID-19 transformó al mundo.
Teloloapan, Guerrero; la Ciudad de México, el Estado de México, Zapopan, Jalisco; Tijuana, Baja California y Arizona, son algunos de los lugares que aparecen en este foto libro, el cual tiene una presentación peculiar: una caja de cartón dentro de la cual vienen las fotografías; esto es porque, De la Calle, como nombraron a este ejemplar, pretende llevar al espectador a un viaje visual desde el tacto, es decir comenzar la lectura al sentir entre sus manos la textura de la caja y las imágenes impresas en formato de postal, como un recordatorio pandémico, en tiempos en que nadie se podía tocar, se busca la interacción entre las personas y el acercamiento cuando estén compartiendo esos recuerdos plasmados en foto”, narró Irving Cabrera, quien dirigió este proyecto.
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El foto libro se presentó esta semana en la Casa Refugio Citlaltépetl, recinto de la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México, con gran número de asistentes que esperaban para escuchar también, la intervención de Federico Gama, uno de los fotógrafos documentales con amplia trayectoria y editor de fotografía en El Heraldo de México.
“La fotografía se aprecia mejor en el espacio que en el tiempo, permite una mejor lectura y escrutinio de su lenguaje y del mensaje que contiene. Cada vez se verán menos fotos físicamente por eso es un gran acierto que, De la Calle, haya logrado imprimir sus fotografías que recogen la memoria del taller en el tiempo de la pandemia y del espacio de la comunidad” así lo describió Gama, quien además propone que los creadores de la imagen apuesten por recursos físicos que abonen a la memoria visual histórica.
Sobre el por qué fotografiar barrios y lugares que han sido estigmatizados, Irving Cabrera, afirma que “la identidad la han construido personas ajenas a nuestros sitios de origen, a través del tiempo nos han visto como objetos de estudio y no como humanos, nosotros los del barrio también tenemos algo que decir y es importante que desde afuera nos vean como humanos y no como salvajes u objetos de estudio”, así mismo destaca la importancia de “fotografiarnos desde la empatía, muy alejados de esos fotógrafos que exotizan nuestras comunidades o a nuestros iguales, eso es parte de lo que hablamos en el taller, nunca se limitó a ninguna persona o se le dijo qué y cómo fotografiar, el resultado es este porque, repito, nosotros también tenemos algo que decir como habitantes del Barrio.
Los fotolibros son de colección y de edición limitada, para contactar con este proyecto se puede escribir por mensaje directo a través de la cuenta de Instagram @fotodecalleiztapalapa.
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