El mito de la princesa diana de Gales tiene una gran cantidad de datos y secretos que quizá jamás podamos conocer al cien por ciento y mucho menos, ella estará aquí para confirmarlos o desmentirlos, sin embargo todavía existen datos curiosos que seguramente no conocías, más allá de su trágica vida personal, desde niña tuvo problemas psicológicos derivados por el divorcio de sus padres cuándo ella tenía tan solo 4 años, mismos que derivaron en una difícil adolescencia.
Debido a su nivel y posición en la realeza, es evidente que el futuro laboral y los problemas económicos de la vida adulta no eran un problema para la princesa Diana de Gales ya que prácticamente tenía su vida resuelta sin la necesidad de trabajar, sin embargo esto puede ser un problema para alguien que tuvo varios intentos de suicidio y numerosas crisis de ansiedad ya que tenía tiempo de sobra para disfrutar del ocio.
Educación básica
Aunque sabemos que la realeza estudia en los colegios exclusivos y más prestigiosos con la finalidad de que tengan una mejor calidad y amplitud de conocimientos, la princesa Diana, tuvo una educación diferente a las niñas de su edad y de su entorno, ya que recibió educación desde su casa impartida por una institutriz, por lo que socializar con niños y niñas fue un proceso difícil para ella.
Luego del tormentoso divorcio de sus padres la pequeña Diana asistió a una escuela en Norfolk, posteriormente cuando cumplió los 12 años fue enviada al internado West Heath School, Sin embargo nunca fue de las alumnas más destacadas ni con las mejores notas, situación que incomodaba un poco a su padre, el conde de Spencer.
Nivel secundaria
Debido al poco interés por realizar una carrera profesional, Diana terminó la escuela secundaria y a los 16 años, luego de terminar sus estudios en Suecia, trabajaba medio tiempo en el área de la limpieza y la otra mitad del día se desempeñaba como niñera. Todo esto fue antes de conseguir un puesto fijo en la escuela Young England, un kindergarden en la que los paparazzis coenzaron a acosarla luego de hacer público su romance con el príncipe Carlos.
Sin duda alguna la falta de vocación para la escuela influyeron para su vida personal, por lo que decidió formar una hermosa familia y ser madre de los pequeños Willian y Harry, sin embargo, luego de su trágico divorcio, la princesa decidió viajar y tomarse tiempo para si misma, haciendo de Nueva York su escondite favorito para evitar los anticuados protocolos de la realeza.
Con información de Vogue
avh