LUTO EN EL DEPORTE

Revelan que muerte del fisiculturista "El Mutante" habría sido por estas posibles causas

A sus 36 años, Illia Golem era conocido por sus extremas rutinas de entrenamiento y su consumo exorbitante de sustancias para mejorar su cuerpo

DEPORTES

·
Illia Golem, fisicoculturista originario de República Checa, que se ganó el apodo "El Mutante”.Créditos: La repentina muerte de Illia Golem, el fisicoculturista originario de República Checa que se ganó el apodo "El Mutante”

La repentina muerte de Illia Golem, el fisicoculturista originario de República Checa que se ganó el apodo "El Mutante” o el "fisicoculturista más monstruoso del mundo" por su impresionante físico ha causado consternación, por su fallecimiento sus 36 años. De acuerdo con las primeras investigaciones el deportista sufrió un infarto mientras se encontraba en casa con su esposa, Anna. Fue ella quien intentó desesperadamente salvarlo con un masaje cardíaco, pero sin éxito. A pesar de la intervención inmediata y del traslado de emergencia en helicóptero, el carrocero no logró sobrevivir.

Aunque la causa exacta de su muerte aún no ha sido confirmada por las autoridades, sale a la opinión pública tres posibles causas que de acuerdo con expertos en salud y fanáticos del deporte todas son asociados al uso excesivo de medicamentos, suplementos y las grandes dosis de carnes rojas que consumía.

Illia Golem, fisicoculturista originario de República Checa, que se ganó el apodo de "El mutante". Créditos: @salvatore7max

Sigue leyendo: 

¿De qué murió Xisco Serra, el reconocido fisicoculturista español?

¿Quién era Matheus Pavlak, el fisicoculturista brasileño que murió a los 19 años?

  • Ataque cardíaco por uso de esteroides

Una de las principales teorías apunta a que Illia Golem sufrió un ataque cardíaco, como resultado de su uso prolongado de esteroides. En varias ocasiones, el fisiculturista mencionó que consumía “cantidades extremas” de testosterona, llegando a inyectarse hasta 6 gramos por semana, una dosis que excede ampliamente los niveles recomendados incluso en el ámbito del fisicoculturismo.

Además,Golem también consumía grandes cantidades de hormona de crecimiento, lo que contribuyó a su masiva ganancia muscular.

El uso prolongado de esteroides anabólicos está asociado con un mayor riesgo de enfermedades cardiovasculares, ya que pueden causar hipertensión, aumento de los niveles de colesterol y agrandamiento del corazón. Estos factores aumentan el riesgo de sufrir infartos o accidentes cerebrovasculares, un desenlace trágico que ha afectado a varios fisicoculturistas jóvenes en los últimos años.

  • Enfermedad cardiovascular por uso excesivo de Synthol

Otra hipótesis que ha cobrado relevancia es el posible vínculo entre la muerte de Illia Golem y el uso de Synthol, una sustancia inyectable compuesta mayormente por aceite, lidocaína y alcohol benzílico, utilizada por algunos fisicoculturistas para aumentar rápidamente el volumen de sus músculos sin necesidad de entrenamiento intensivo.

Aunque "El Mutante" no se reconoció como un usuario frecuente de esta sustancia se sospecha que pudo haber experimentado complicaciones relacionadas con su uso.

El uso prolongado de esteroides anabólicos está asociado con un mayor riesgo de enfermedades cardiovasculares, ya que pueden causar hipertensión, aumento de los niveles de colesterol y agrandamiento del corazón. Estos factores aumentan el riesgo de sufrir infartos o accidentes cerebrovasculares, un desenlace trágico que ha afectado a varios culturistas jóvenes en los últimos años.

El Synthol puede provocar infecciones, daños en los nervios, embolias pulmonares y accidentes cerebrovasculares, además de la formación de granulomas llenos de aceite en los músculos. Aunque la apariencia volumétrica puede ser inmediata, los riesgos para la salud son sumamente elevados, y algunos especialistas sugieren que este pudo haber sido un factor contribuyente en la muerte de Golem.

  • Daño hepático o renal por exceso de proteínas

La tercera teoría se centra en la asombrosa cantidad de calorías que "El Mutante" ingería diariamente para mantener su descomunal masa muscular.

Con una dieta que alcanzaba las 16,500 calorías al día, basada principalmente en proteínas, Golem sometía a su cuerpo a una presión constante para procesar y almacenar energía. Los expertos en nutrición advierten que una ingesta tan excesiva de proteínas puede llevar a un fallo renal o hepático, dos órganos clave en el metabolismo y la eliminación de desechos del cuerpo.

El hígado y los riñones pueden verse gravemente afectados cuando se les somete a una sobrecarga alimenticia de este tipo durante un periodo prolongado. Si bien Golem había alcanzado un estado físico impresionante, este esfuerzo constante podría haber pasado factura, contribuyendo a un colapso orgánico que desencadenara su fallecimiento.